El número de personas reportadas como desaparecidas en el incendio que está causando estragos en el norte de California aumentó el jueves a más de 600, al tiempo que los restos de siete nuevas víctimas fueron encontrados por los equipos de rescate, informó un sheriff local.
El sheriff del condado de Butte, Kory Honea, dijo en una conferencia de prensa que la cifra de desaparecidos subió a más del doble durante el día y se situó en 631 personas, mientras investigadores chequeaban las llamadas de emergencia hechas cuando se desataron las llamas hace una semana.
"Quiero que entiendan que el caos con el que lidiamos fue extraordinario" cuando el fuego empezó, explicó a los periodistas, al intentar justificar la impresionante nueva cifra de desaparecidos.
La cifra de muertos en el llamado "Camp Fire", que ya es el incendio forestal más mortal de la historia en este estado del oeste de Estados Unidos, también ascendió a 63 después de que se descubrieran siete cuerpos más, declaró Honea.
Al menos otras tres personas murieron en el sur de Californa en otro incendio bautizado como "Woolsey Fire".
Se espera que el presidente Donald Trump visite el sábado California para encontrarse con víctimas de los incendios.